Por Ángel Huerta
Desde el siglo XI la monarquía inglesa comenzó a construir palacios y casas reales para ser ocupados tanto por los reyes como por los príncipes y demás miembros de la corona, patrimonio que pertenece directamente a los soberanos del Reino Unido en turno, y por tanto, no pueden ser reconstruídos sin previa autorización, mucho menos vendidos.
"Guillermo el conquistador" fue el encargado de construir el icónico Castillo de Windsor alrededor de los años 1001 a 1100 d.C., aunque antes era conocido como la Casa de Sajonia-Coburgo y Gotha. Dentro de esta imponente residencia vivieron alrededor de 39 monarcas, aunque la Reina Isabel II optó por utilizarla como su casa de fin de semana, así como la residencia que elegía para celebrar eventos especiales y bodas reales.
EL DETALLE QUE CARLOS III OBSEQUIABA A LADYDI PARA MANIPULARLA, Y NO ERA ALGO COSTOSO
Son poco más de 30 el conjunto de construcciones que forman parte del patrimonio de la familia real, mismas que fueron edificadas con un propósito particular que también ha ido cambiando conforme el paso de los años por decisión directa de los reyes en trono. Algunas casas han sufrido daños o accidentes que han obligado a los residentes a moverse a otra lujosa vivienda, cambiando así lo estipulado por la monarquía necesariamente.
30/09/2024
30/09/2024
30/09/2024
30/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
29/09/2024
28/09/2024
28/09/2024
28/09/2024
28/09/2024
28/09/2024