Por Florencia Garcia
Desde que anunciaron su compromiso el público se muestra muy entusiasmado por la boda de Gabriel Soto e Irina Baeva. La polémica pareja finalmente decidió dar el siguiente paso en su tormentosa relación, la cual comenzó en medio de rumores de engaños e infidelidades.
Cierto o no, la actriz de origen ruso y el galán de Televisa pasarán por el altar, pero sólo podrán hacerlo por civil ya que Soto no anulará su matrimonio con Geraldine Bazán, la madre de sus dos hijas. Y es que toda la situación es compleja ante todo porque conseguir este trámite implica hacer el pedido al Tribunal Eclesiástico.
El mismo debe encargase de decidir si da o no lugar al pedido. Por otra parte, resulta complejo que un matrimonio se pueda disolver. En palabras del padre católico José de Jesús Aguilar esto sólo se realiza en casos extremos ya que no se trata de un simple acuerdo sino de un sacramento, un sagrado juramento ante Dios.
De este modo a la parejita sólo le queda la opción del civil. Por su puesto que la prensa no dejó pasar por alto el detalle y comenzó a averiguar lo que podría representar ante la Iglesia Ortodoxa Rusa tal acto. Y es que según esta religión este tipo de unión no tiene un gran valor y nadie te puede considerar una esposa.
En cuanto a la fecha de celebración los famosos no quisieron dar mayores detalles. Soto visitó el programa 'Hoy' y adelantó que tienen pensado casarse a finales del año 2021. Sin embargo, aún dependen de un par de proyectos que están en puerta y de los que depende que la fecha se atrase o no.
30/09/2024
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