Nadie lo sabía, las prohibiciones del príncipe Harry a Meghan Markle

La relación entre el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, ha estado llena de polémicas, controversias, rechazo de algunos y admiración de otros, además de grandes cambios a la forma de vida que cada uno llevaba cotidianamente. 

Los ahora duques de Sussex, conviven dentro de un ambiente fuera de las imposiciones y normas reales, aunque han tenido que ajustarse a muchas otras reglas que existen alrededor de ello; haber renunciado a la nobleza, conlleva muchas prohibiciones que deben acatarse. 

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No enviar cartas, promociones ni postales en el buzón de su casa; ignorar a los vecinos y evitar entablar conversaciones casuales con ellos; no permitir que extraños acaricien a sus perros y rehusarse a hablar sobre sus hijos, son solo algunas de las cosas prohibidas estrictamente para la pareja en su vida diaria. 

Muchos aseguran que estas normas son ridículas, absurdas e insostenibles, incluso extrañas, pues la misma reina Isabel acostumbraba a tomar té con sus vecinos, saludarlos cordialmente y tratarlos con toda normalidad. 

 Las prohibiciones fueron impuestas por la rebeldía de la pareja

Frente a los rumores sobre la unión de la pareja -y del fuerte rechazo de la reina hacia Meghan- han surgido varias teorías sobre la vida a la que Harry y su familia fueron orillados, exponiendo que muchas normas únicamente buscan complicar la vida de la pareja y llevarla al límite, para que así algún día Harry se arrepienta de su matrimonio y regrese a la vida de royal.