Por Florencia Garcia
Tras años en el MCU, Scarlett Johansson finalmente tuvo su propia pelícua. Black Widow se estrenó pero las cosas no resultaron como los fanáticos o la estrella de Hollywood esperaban.
Por el momento la película es un éxito, pese a que llegó muy tarde y no le hizo justicia a Johansson pero esto no fue lo que le molestó a la celebridad. El problema que surgió entre ella y la compañía se debió al estreno.
Según indicó The Wann Street Journal, el estreno fue en cines y en Disney+ al mismo tiempo. Los usuarios pudieron pagar una cuota de Premier Access sin asistir a las salas y esto es el objeto de la demanda de Johansson contra Disney por incumplimiento de contrato.
La demanda asegura que en su acuerdo con Marvel Entertainment de Disney le garantizaba un estreno teatral exclusivo y que su salario se basaba en gran parte en la taquilla del film. Dicho de otra manera, el sueldo de la actriz dependía de las ganancias de la cinta donde claramente serían menores si el streaming entraba en juego.
Con la pandemia son muchos los que apuestan al streaming para estrenar sus contenidos, pero esto afecta a los actores y al resto de los equipos de producción impactando de forma negativa en sus ganancias.
Frente a esto Disney respondió que no existe mérito en la presentación. Agregaron que la demanda es 'trisite y angustiosa por su insensible desprecio a los horribles y prolongados efectos globales de la panemia de COVID.19'.
Agregaron que por su trabajo Johanssson recibió 20 millones de dólares y que el lanzamiento en Disney+ con Premier Access sólo mejoró su capacidad de generar una compensación adicional.
30/09/2024
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