Las tradiciones de Año Nuevo que seguía la reina Isabel II y nadié continuó

El 2022 fue un año que dejó gran dolor e importantes cambios dentro de la familia real británica; tras la desaparición de la reina Isabel II, los miembros de la corona no pasaron unas celebraciones navideñas tradicionales, ni recibieron la llegada del 2023 como la reina acostumbraba hacerlo, aún cuando en vida ella mostró la importancia que representaban sus costumbres. 

A diferencia de las celebraciones que todo el Reino Unido se habituó durante las siete décadas que Isabel II estuvo en el trono, el 2023 llegó a los ciudadanos con nostalgia, tristeza e incertidumbre, sentimientos que aumentaron con el mensaje del rey Carlos III, mismo que proclamó en honor de su madre.

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Los ahora reyes de Inglaterra, Carlos III y Camilla, no celebraron la llegada del año de ninguna forma sorprendente, pues solo cenaron temprano el 31 de diciembre del 2022, y asistieron a misa durante la mañana del 1 de enero del 2023, en la Iglesia de Santa María Magdalena, situada en Sandringham. Este evento fue el único que rescataron de las tradiciones de la reina Isabel II, pues ella acostumbraba a recibir el nuevo año de una manera extraordinaria.

Las tradiciones de año nuevo que se fueron con la reina Isabel II

La monarca del Reino Unido se caracterizó por celebrar la Navidad y el Año Nuevo de manera muy particular y especial, pues eran fechas que ella consideraba indispensables para la unión familiar y la conmemoración de los antecesores que han trascendido. 

La reina acostumbraba a viajar a Sandringham desde principios de diciembre, y se quedaba ahí hasta febrero (para conmemorar la partida de su padre, el rey Jorge VI); junto a su núcleo familiar, aseguran que a Isabel II le gustaba ofrecer un espectáculo privado de fuegos artificiales, esperar despierta hasta las 00:00 horas para recibir el año nuevo y agradecer por el viejo, cenar hasta media noche, asistir a misa el 1º de enero, y convocar a sus allegados a una importante comida el primer día del nuevo año. De todas estas tradiciones, los nuevos reyes sólo conservaron la asistencia a misa.